La palabra “el lavado” puede causar las asociaciones relacionadas con el riego, sobre todo si es la gente que tiene poca imaginación sobre el cultivo de cannabis. En realidad esta palabra significa un intervalo durante la fertilización con abonos. El lavado es una irrigación con el uso del agua del grifo. Parecería que este proceso es muy simple pero muchos novatos se chocan con problemas. No cada uno sabe, cuando es necesario de dejar de fertilizar la planta y lavar suelo o sustrato.
¿Cuando lavan el cannabis?
Hacer la interrupción durante la fertilización y regar abundantemente la planta de cannabis con el agua es necesario en las siguientes situaciones:
- cambio de abonos;
- eliminación al exceso o desequilibrio de las sustancias nutritivas;
- para preparación de la recogida de cosecha.
Cambio del régimen de alimentación
Con el cambio de las etapas del cultivo es necesario cambiar los abonos. Si en la fase de vegetación el intervalo se hace en caso de un alto contenido del nitrógeno en las mezclas nutritivas, durante la floración es necesario dar a la planta más fósforo y potasio. Cuando se realice este tránsito, es importante dar a la planta gastar sus reservas. Así la planta de cannabis se prepara para una nueva fase de su desarrollo. Se puede compararla con el organismo humano. Cuando acabemos de comer en el estómago no se queda espacio para otros platos. Debemos esperar, mientras la comida se indigesta y hasta que aparecerá de nuevo el hambre.
Bloqueo de las sustancias útiles
A veces pueden formarse tales condiciones que los abonos no pueden llegar a las raíces de la planta. Esto puede pasar por diferentes causas – desde de la fertilización excesiva hasta oscilaciones del nivel de рН, una medida de acidez o alcalinidad, etc. Las sustancias se acumulan en el suelo, y el cannabis se queda sin alimentación. El lavado ayudará a librarse de estancamientos y recuperar alimentación de las raíces. Así el cannabis recomenzará su crecimiento.
Antes de la recogida de cosecha
Una semana antes de la recogida de cosecha es necesario realizar el lavado final para que la planta use sus propios recursos, transforme por completo aquellas sustancias que se han quedado en ella misma. Es necesario efectuar el último lavado porque mejora olor y gusto de la marihuana.
El lavado correcto
El método consiste en la irrigación abundante del suelo con el uso del agua del grifo. Si es necesario eliminar al bloqueo, inunden cannabis con el líquido con el nivel de рН fijo: para el suelo debe ser 6,0-6,8 y para la hidroponía – 5,5-6,5. Además estos índices son correctos durante el tránsito a otra mezcla nutritiva. Los recipientes con la planta se llenan del agua por completo. Hay que esperar 15 minutos y repetir el procedimiento.
Por medio del aparato especial, el medidor TDS, se puede medir el nivel de la mineralización de la solución de suelo. Hay que comparar los índices de la medida del agua de drenaje con el agua que se usa para el lavado. Deben diferenciarse un poco y eso demuestra la eliminación completa de los abonos del sustrato.
El lavado antes de la recogida de cosecha debe realizarse a tiempo también. De otro modo la calidad del cannabis bajará sin ninguna duda. Los intervalos temporales varían depende de las condiciones del cultivo. Si el cannabis crece en el suelo, el lavado se realiza una o dos semanas antes de la recogida de cosecha; algodón mineral, sustrato de coco y otras variedades de la hidroponía exigen menos tiempo, aproximadamente una semana.
Determinar el tiempo para el lavado se puede por tricomas. Cuando adquieran el matiz de leche, el contenido de THC será máximo. Entonces hay que realizar lavado.
¿Cuando no se puede lavar el cannabis?
Si usar en calidad de los abonos unas sustancias orgánicas, el lavado será necesario para sus plantas. El agua pura puede estropear el ecosistema creado. El cannabis que crece en el suelo con muchas sustancias orgánicas siempre debe recibir el agua pura durante el riego, por eso no es necesario inundarlo.
Además hay que recordar que la humidificación excesiva del suelo daña a las plantas hasta más que falta del riego. Por eso hay que realizar el lavado conforme a las recomendaciones y observar la planta. Si las hojas comienzan a marchitarse, entonces las raíces no tienen aire suficiente para respirar y hay que terminar el riego.
Después del lavado se puede recoger la cosecha y es necesario no olvidar de los cogollos. Es necesario secar y curar cogollos del modo correcto. La recogida de cosecha correcta que incluye estos procedimientos garantizará la calidad excelente.
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